Tres semanas sin agua potable en la Axarquía: El Borge y Totalán siguen a la espera mientras Iznate recupera la normalidad
15 de diciembre de 2025 (14:12 h.)
Los municipios de El Borge y Totalán continúan sin agua potable tras más de tres semanas de restricciones debido a niveles elevados de clorato en el suministro, un parámetro que supera el límite fijado por la nueva normativa estatal. En cambio, Iznate ha logrado restablecer la normalidad tras una inversión municipal que ha superado los 15.000 euros.
El problema ha afectado a estas tres localidades de la Axarquía —que en conjunto apenas suman unos 3.000 habitantes— y no está relacionado con una contaminación de los acuíferos, ya que el abastecimiento procede del pantano de La Viñuela, sino con fallos en el proceso de desinfección del agua, en ocasiones realizado con cloro.
Un límite más estricto que activa las alarmas
La entrada en vigor del Real Decreto 3/2023, que actualiza los criterios sanitarios del agua de consumo en España, ha fijado el límite de clorato en 0,7 miligramos por litro, un umbral que, al superarse, obliga a declarar el agua no apta para el consumo humano.
Ante los informes técnicos que confirmaban estos niveles elevados, los ayuntamientos activaron protocolos de seguridad y comenzaron a repartir agua embotellada para beber y cocinar, permitiendo el uso del agua de la red únicamente para tareas domésticas y de higiene.
Iznate fue el primero en dar la voz de alarma
Iznate fue el primer municipio en detectar el problema, a finales de octubre. Según su alcalde, Gregorio Campos, los análisis revelaron altos niveles de clorato en los depósitos que abastecen al municipio. Tras comunicarlo a las autoridades sanitarias, el pasado 14 de noviembre se declaró oficialmente el agua como no apta.
Después de semanas de controles y análisis diarios, los informes técnicos han permitido a Iznate recuperar el suministro potable, aunque con un importante impacto económico. “Entre los análisis y el reparto de agua embotellada, el coste ha ascendido a entre 15.000 y 17.000 euros”, ha señalado Campos, quien ha pedido a la Junta de Andalucía algún tipo de ayuda extraordinaria para afrontar un gasto no previsto.
El Borge y Totalán siguen esperando
Mientras tanto, El Borge y Totalán continúan pendientes de que los parámetros se sitúen dentro de los márgenes legales. En Totalán, su alcalde, Miguel Ángel Escaño, ha explicado que se están realizando labores de limpieza de depósitos y purga de tuberías, ya que los cristales de clorato pueden quedar adheridos a las conducciones.
“Seguimos repartiendo agua embotellada, pero confiamos en que pronto podamos volver a la normalidad”, ha indicado.
“No hay riesgo inmediato para la salud, pero sí a largo plazo”
El experto en gestión del agua en la Axarquía José Manuel Sánchez Pulido ha subrayado que el clorato puede aparecer en el agua incluso en niveles bajos y que su presencia suele deberse a picos puntuales o a una desinfección deficiente.
“El agua puede usarse para higiene o limpieza sin problema, pero su consumo continuado podría resultar perjudicial para la salud a largo plazo, aunque no suponga un riesgo inmediato”, ha aclarado.
Sobre las posibles soluciones, el técnico apunta a tecnologías como la ósmosis inversa o el intercambio iónico, aunque advierte de que su elevado coste las hace poco viables para pequeños municipios.
Infraestructuras envejecidas y llamada a la inversión
Los alcaldes afectados han evitado señalar directamente a Axaragua, la empresa pública responsable de la gestión del agua en la zona oriental de Málaga, aunque sí han reconocido la necesidad de modernizar infraestructuras con más de 35 años de antigüedad.
“La clave está en la transparencia y en invertir en sistemas que permitan una gestión más eficaz del agua, especialmente en una comarca marcada por la escasez hídrica”, ha concluido Sánchez Pulido.
